viernes, 3 de agosto de 2007

El tremendo error

Ya estoy de vuelta de mis "vacaciones", tres semanas donde paso de todo excepto cosas de poca importancia. He cambiado, y estoy en un momento suspendido en una burbuja sobre un océano, esperando a que Dios la pinche, caiga y siga nadando hacia algún puerto que Él me muestre (espero).

Vino Sam, mi amigo de la infancia y aunque solo estuvo dia y medio lo aprovechamos lo mejor posible. Hablando de estos cambios que estamos viviendo los dos, y que pensamos que Dios los dirige ya que tiene nuestra confianza, dijo una frase que la tengo totalmente asumida pero también olvidada: "Es un tremendo error creerte fuerte cuando en realidad eres débil".

Es curioso, es una frase que tengo totalmente asumida y repetida para mi mismo desde hace mucho, Jesús habla de ello, Sun Tzu también, Dios en Apocalipsis es tajante "tu dices: Yo soy rico, y me he enriquecido, de ninguna cosa tengo necesidad, y no sabes que tú eres un desventurado, miserable, pobre, ciego y desnudo".

Aun así, en ese momento parecía que me la dijo Dios mismo en un aspecto en concreto: creerme que estoy fuerte en el Señor por las cosas que hago, y en realidad estoy más carente que nunca, en parte por los cambios que estoy viviendo. No lo reflejé, pero esas palabras me traspasaron, provocaron un escalofrío. Fueron palabras para un momento, situación y aspecto en concreto. Sabía perfectamente el porqué del escalofrío, y creo que alguien habló a través del bueno de Samu.